jueves, mayo 19, 2005

Hoy no me siento bien

Estoy cansada. El dueño del locutorio me pidió que me quedara a cubrirlo porque tiene un compromiso familiar, creo que se le murió una tía.
El problema es que me lo pidió de tan mala manera! Y yo no quería quedarme, esa es la verdad. Me encontraba con Cintia, el último día antes de que se interne para estudiar no sé cuántas materias, me dijo.
Hoy es el cumple de mi viejo, y por milagro está en casa, y no de viaje como casi todos los años. Así que mi vieja hacía una comida especial: lechón asado. Es lo que me estoy perdiendo ahora, en este momento. Estoy furiosa, y mal humorada.
Además no sé para qué escribo todo esto acá. No sé para quién, en realidad. ¿alguien lee esto que escribo?, además de mí claro.
Pero lo que realmente me puso más mal es que esa perra de Patricia me ignoró por teléfono. ¿Cómo pudo? Y sí, yo la llamé, porque sabía que ella no me llamaría aunque fuese su única posibilidad de cobrar una comisión en todo el mes. Me atendió, y me preguntó quién era dos veces, haciéndose la boluda. Agrrrrrrr, qué bronca que me dio!!! A partir de ahí la traté mal, y ella peor. Conclusión: no la pude invitar a nada, esa era mi intención. Y ahora estoy acá, con una mufa total.
Cintia no me ve hoy, y no sé cuándo nos volveremos a ver. Su novia se va a jugar al hockey por no sé dónde, y ella quería acompñarla. “Acompañar al equipo” se dice entre ellas, porque la novia, Luciana o algo así es el nombre, es más tapada que una mermelada en un frasco.
Y encima no puedo ir a bailar con Mechi, porque sea la hora que sea que salga de acá, voy derecho para casa a saludar al viejo.

Uffff! Qué día el de hoy, y qué noche me espera!!!

1 comentario:

leche! dijo...

no eres la única que te lee.